La cerrajería como oficio está dedicada a la reparación y mantenimiento de cerraduras, candados, cerrojos y cilindros. Una cerradura es un mecanismo de metal instalado para impedir que puertas y tapas se puedan abrir sin una llave. En función de su uso existen varios tipos de cerraduras:
- Cerradura de embutir: se empotran en el lateral de la puerta, se utilizan en puertas de madera y metal. Consiste en un pestillo que al girar la llave bloquea la apertura de la puerta.
- Cerradura de sobreponer: son cerraduras que se instalan sobre la puerta, en el interior en lugar de empotradas. Su instalación es muy sencilla debido que al instalarse sobre la puerta no es necesario hacer el hueco para embutir la cerradura. Este tipo de cerraduras son mucho más resistentes ante un intento de forzado. La estética es la principal desventaja de este sistema dado que el mecanismo queda a la vista.
- Cerraduras de seguridad: son también llamadas cerraduras multipunto. Muy seguras debido a que consta de varios puntos de anclaje, se utilizan en puertas blindadas y reforzadas fijándose en el marco.
- Cerraduras tubulares o pomos con llave: su sistema de apertura es igual que un picaporte. Se utilizan en puertas de habitaciones, baños y espacios públicos y se pueden cerrar desde el interior mediante un botón.
- Cerradura de cilindro: se utilizan en puertas exteriores y son muy comunes. Es un cilindro que tiene unas pestañas que se ajustan al molde de la llave y accionan una leva que abre o cierra la puerta.
- Cerrojos: estos mecanismos evitan que las puertas sean forzadas mediante apalancamiento. Se utilizan como complemento en las puertas blindadas con cerradura de seguridad y son mucho más económicos que las cerraduras de estas últimas. Podemos encontrar algunos modelos con cerradura que nos permite cerrarlos desde fuera. Cuando nos encontramos en el interior de la vivienda podemos accionar un bloqueador de modo que la puerta no pueda abrirse desde el exterior.
- Cerraduras eléctricas: son las cerraduras que podemos ver en la mayoría de portales que tienen portero electrónico. La puerta siempre queda cerrada y la apertura se realiza con llave desde el exterior, con impulso eléctrico desde la vivienda o con la manilla desde el interior del portal. Son muy sencillas de colocar.
- Cerraduras puerta de cristal: son cerraduras sencillas utilizadas en espacios comerciales, vitrinas, expositores etc.… de muy fácil instalación y con la posibilidad de cerrar una o dos puertas.
Para un correcto mantenimiento y el óptimo funcionamiento de las cerraduras, se recomienda aplicar polvo de grafito. Este producto es de color gris oscuro y de brillo metálico, se presenta en recipientes con aplicador y nos permite que el polvo se adhiera al interior de la cerradura.
CANDADOS
Dentro de este apartado no nos podemos olvidar de los candados. Mecanismos para impedir que puertas, cajas, cajones, etc.… se abran. Consisten en una caja metálica con una cerradura que acciona un gancho que lo abre o lo cierra. Existen varios tipos.
- Candado normal de llave.
- Candado de combinación: utilizado en taquillas de trabajo, gimnasios, etc.…Se basa en un teclado numérico y un botón, de tal forma que al introducir el código correcto el candado se abre.
- Candado de persiana: son candados cuadrados con un vástago que se extrae al accionar la llave.
- Candado de empotrar: utilizado en puertas y persianas enrollables, enterrado para mayor seguridad.
Es importante conocer unos artículos que nos permitan aumentar un poco más la seguridad.
CAJAS DE SEGURIDAD
Son cajas metálicas con un sistema de apertura que funciona con claves y sirven para guardar bienes de valor. Existen dos tipos de cajas las de empotrar y las de sobreponer.
MIRILLAS
Son dispositivos que nos permiten saber quién está llamando a nuestra puerta, hay dos tipos:
- Mirilla convencional.
- Mirilla digital: de fácil montaje y cada vez más utilizada, tendremos una imagen con solo pulsar un botón. De gran utilidad para personas mayores por su gran pantalla.